El departamento de Boyacá concluyó el año 2023 con un preocupante incremento en los casos de secuestro y extorsión, generando una situación de alerta en las autoridades policiales y militares locales.
Uno de los eventos más impactantes ocurrió a finales de 2023 en el municipio de Labranzagrande, donde el ingeniero Luis Eduardo Pérez Nossa y el transportador José Bernardo Vivas Holguín fueron secuestrados por cuatro individuos mientras se desplazaban de Yopal (Casanare) al municipio de Duitama (Boyacá). Este suceso encendió las alarmas de las autoridades, subrayando la necesidad de abordar de manera urgente la creciente problemática.
La coronel María Margarita Mantilla, comandante del Departamento de Policía de Boyacá, expresó su preocupación sobre la naturaleza de estos secuestros, señalando que muchos de ellos se llevaron a cabo mediante falsas solicitudes de servicios. «Llaman a las personas ofreciendo un servicio por diversos motivos, y cuando las víctimas acuden al lugar indicado, lamentablemente se encuentran con la tragedia del secuestro», afirmó la comandante.
En respuesta a esta situación, la coronel Mantilla anunció la propuesta de actividades de prevención que llevarán a cabo el Gaula de la Policía y el Gaula Militar en el departamento durante el año 2024. Estas iniciativas buscan abordar de manera proactiva las circunstancias que han propiciado el aumento de casos, implementando estrategias que disuadan la ejecución de estos delitos.
Además de los casos de secuestro, las cifras revelan que durante el año pasado se registraron 54 homicidios en el departamento. La comandante destacó que, a pesar de este aumento, Boyacá sigue siendo considerado un departamento relativamente seguro. No obstante, hizo hincapié en que las lesiones personales, el hurto a vehículos y el hurto a personas son delitos que están impactando negativamente en la región.
Ante esta situación, se presentaron propuestas para el año en curso, destinadas a contener estos delitos. Tanto la Policía como el Ejército Nacional se comprometieron a coordinar esfuerzos para abordar no solo la problemática de la seguridad ciudadana, sino también la lucha contra los delitos ambientales.
Las autoridades locales reconocen la necesidad de una acción conjunta y coordinada para enfrentar estos desafíos. La comunidad espera que las propuestas presentadas resulten eficaces y contribuyan a restablecer la tranquilidad en el departamento de Boyacá.
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