La ciudad de Duitama enfrenta una situación crítica de desabastecimiento de agua que ha llevado al alcalde, José Luis Bohórquez, a declarar Calamidad Pública y tomar medidas drásticas, incluido el aplazamiento de las clases en colegios locales. Más de 18 mil niños se verán afectados por esta decisión, viéndose obligados a estudiar en modalidad de alternancia.
En una entrevista para Caracol Radio, el alcalde Bohórquez explicó la urgencia de la situación y la necesidad de buscar soluciones inmediatas. La falta de fuentes hídricas adecuadas para abastecer a la ciudad ha llevado a una histórica escasez de agua en Duitama. El río Surba, que normalmente suministra hasta 180 litros por segundo, actualmente fluye a menos de 100 litros por segundo, afectando a más del 60% de la población.
Ante esta emergencia, el alcalde tomó la decisión de declarar Calamidad Pública y solicitó a las instituciones educativas que pospongan el inicio de clases por una semana más. La medida busca permitir a los colegios diseñar modelos de alternancia para que los estudiantes puedan regresar a las aulas de manera segura a partir del 5 de febrero.
«Se toma la decisión, primero, de declarar Calamidad Pública y, segundo, los colegios tienen esta semana para que diseñen su modelo de alternancia para que empiecen el 5 de febrero, alternancia porque no puedo enviar a los niños a las casas a estar en educación virtual por temas de salud mental», afirmó el alcalde Bohórquez.
La crisis del agua en Duitama es un problema que ha persistido a lo largo del tiempo, y la dependencia de la ciudad de solo dos fuentes hídricas principales ha exacerbado la situación. La administración municipal trabaja arduamente para abordar la emergencia, garantizar el suministro de agua y proteger la salud de la comunidad.
Esta decisión también destaca la preocupación por la salud mental de los estudiantes, ya que el alcalde reconoce las dificultades de enviar a los niños a sus hogares para educación virtual en medio de la crisis. La modalidad de alternancia se presenta como una solución que busca equilibrar la continuidad educativa y la atención a la salud mental de los niños afectados por la crisis del agua en Duitama.
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