Cuestionamientos y observaciones en torno a la plaza de mercado de Villa de Leyva: ¿Despilfarro y corrupción?
La inversión de $13.134 millones destinada al mejoramiento de la Plaza de Villa de Leyva ha generado un intenso debate, con veedores de la obra expresando preocupaciones sobre el elevado costo, las decisiones de diseño y las posibles implicaciones de corrupción. La obra, aparentemente impulsada por el ex alcalde Javier Castellanos, ha sido objeto de críticas y señalamientos por parte de quienes consideran innecesaria y perjudicial para la identidad cultural del lugar.
La Contraloría General de la República, gerencia departamental en Boyacá, ha convocado a los veedores de la obra para discutir el estado actual del contrato 2839/22 y evaluar posibles compromisos para la conclusión del proyecto. Sin embargo, los veedores han rechazado la propuesta de acordar compromisos, insistiendo en la necesidad de detener las obras mientras se evalúa su avance y se exploran alternativas de aprovechamiento.
En una extensa carta dirigida a la Contraloría, los veedores expresan una serie de cuestionamientos y observaciones que abordan aspectos fundamentales del proyecto. Entre las principales inquietudes se encuentra el costo exagerado de la obra, considerado susceptible de despilfarro y corrupción. Además, se destaca la falta de un concurso de arquitectos a nivel nacional para el diseño arquitectónico, una omisión que cuestiona la transparencia y la participación en la toma de decisiones.
El acuerdo de entendimiento entre la Embajada de México en Colombia y la Secretaría de Turismo de Boyacá también ha generado controversia, ya que algunos ven este convenio como un esfuerzo por fortalecer la calidad del servicio y promover el intercambio cultural, mientras que otros lo critican como innecesario y carente de fundamentos.
Los veedores insisten en que la plaza de mercado no solo es innecesaria, sino también inconveniente, violatoria de normativas y con un diseño que no conserva los valores culturales del lugar. Cuestionan el proceso de licitación, señalando una falta de claridad en los estudios previos del proyecto y expresando dudas sobre el beneficio económico real para los empresarios y comerciantes de Villa de Leyva.
La carta a la Contraloría también destaca la pérdida de identidad de la plaza de mercado, un espacio que tradicionalmente ha sido un escenario de interacción social entre la población local, turistas y comerciantes. Los veedores plantean la necesidad de suspender temporalmente la construcción para realizar evaluaciones técnicas, formular un Plan Especial de Salvaguarda y promover mesas de concertación para rediseñar el proyecto de manera más coherente y sostenible.
La controversia en torno a la Plaza de Mercado de Villa de Leyva subraya la importancia de un diálogo abierto, transparente y participativo en la planificación y ejecución de proyectos que afectan el patrimonio cultural y la identidad de una comunidad. Los veedores, las autoridades locales y la Contraloría tienen ahora el desafío de encontrar soluciones que respeten y preserven la riqueza histórica y cultural de Villa de Leyva.