En un operativo reciente, las Fuerzas Militares de Colombia lograron rescatar a dos menores de edad que habían sido reclutados de manera forzada por el Ejército de Liberación Nacional (ELN) en Boyacá. Esta acción se enmarca en los esfuerzos continuos de las autoridades para combatir el reclutamiento infantil por parte de grupos armados ilegales en el país.
Durante un allanamiento judicial por el delito de extorsión, llevado a cabo por el Gaula Militar Casanare en coordinación con la Policía y la Fiscalía, las tropas se dirigieron a la vereda Guayabal, en la zona limítrofe entre Boyacá y Casanare. El objetivo del operativo era desmantelar una estructura criminal que extorsionaba a comerciantes, transportadores, ganaderos y empresarios de la región.
Al inicio del operativo, se produjo un enfrentamiento armado cuando los integrantes del ELN abrieron fuego contra las tropas. En medio de los combates, los insurgentes decidieron huir, abandonando a dos menores de edad que habían sido reclutados a la fuerza y obligados a participar en las hostilidades. Los menores, una niña de 13 años y un niño de 16 años, fueron encontrados por las Fuerzas Militares y puestos a salvo.
«Este proceder es una clara violación al artículo 162 del Código Penal Colombiano, que prohíbe reclutar o alistar a niños menores de 15 años en las fuerzas armadas o utilizarlos para participar activamente en las hostilidades, y tipifica este delito como crimen de guerra», indicó el comunicado emitido por las Fuerzas Militares.
En lo que va del año, las Fuerzas Militares han logrado rescatar a 238 menores de edad que habían sido reclutados de manera forzada por diversos grupos armados organizados. Estos esfuerzos son parte de una campaña más amplia para proteger a los niños y adolescentes colombianos de la violencia y la explotación por parte de actores ilegales.
Las autoridades continúan con la búsqueda de los demás integrantes de esta estructura delictiva, reafirmando su compromiso de desarticular los grupos armados ilegales y garantizar la seguridad y el bienestar de la población en las zonas afectadas por el conflicto.
El rescate de estos menores subraya la necesidad de seguir fortaleciendo las medidas de protección infantil y de justicia, así como de brindar apoyo integral a las víctimas de reclutamiento forzado, para asegurar su reintegración y recuperación.
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