En un evento cargado de emociones y habilidades deportivas, Colombia reafirmó su posición como una potencia mundial en el taekwondo infantil al coronarse campeona del Mundial de Taekwondo por segundo año consecutivo. El certamen, celebrado en Boyacá, reunió a más de 20 países y más de 2.000 deportistas durante cuatro intensos días de competencia.
La selección colombiana logró consolidarse en lo más alto del podio al obtener un impresionante total de 80 medallas de oro, 66 de plata y 80 de bronce, superando ampliamente a sus rivales. Argentina ocupó el segundo lugar del podio con 30 medallas de oro, 25 de plata y 22 de bronce, mientras que Estados Unidos quedó en la tercera posición al conseguir 22 oros, 26 platas y 20 bronces.
Entre los países europeos, España fue el mejor ubicado, alcanzando el cuarto lugar con dos oros, una plata y un bronce. Por su parte, Corea, tradicionalmente una de las potencias en este deporte, se ubicó en la novena posición con solo dos platas y un bronce.
El Mundial, que tuvo como sedes a los municipios de Nobsa y Sogamoso, en la provincia de Sugamuxi, destacó no solo por la alta participación de competidores en categorías infantiles, cadetes y máster, sino también por la excelente organización y acogida del evento en Boyacá. Este éxito organizativo y deportivo ha generado expectativas sobre la posibilidad de que Boyacá no solo repita como sede en futuras ediciones del mundial, sino que también acoja eventos de mayor envergadura en el ámbito internacional.
La destacada actuación de la selección colombiana en esta edición del Mundial no solo revalida su título, sino que consolida a Colombia como una referencia en el taekwondo infantil y cadete, lo que augura un futuro prometedor para este deporte en el país.