La crisis que atraviesa el municipio de Samacá, Boyacá, se intensifica debido a las lluvias torrenciales que han azotado la región, llevando al alcalde Wilson Castiblanco Gil a declarar alerta roja en el territorio. Este 19 de noviembre, el mandatario local recorrió las zonas más afectadas por los desastres naturales, constatando la magnitud de las pérdidas y el sufrimiento de las familias.
Las lluvias han causado estragos en la infraestructura del municipio, con crecidas de afluentes, inundaciones, la pérdida de la banca en varias vías y daños severos en viviendas. Además, los cultivos y pastos, vitales para la economía local, también se han visto gravemente impactados, lo que agrava aún más la situación en esta zona agrícola de Boyacá.
El alcalde Castiblanco Gil, acompañado del Comité de Gestión del Riesgo, identificó 17 puntos críticos en el municipio y aseguró que, de inmediato, se activaron todos los protocolos de emergencia para atender cualquier eventualidad. «Gracias al apoyo del Cuerpo de Bomberos de Samacá, hemos podido coordinar esfuerzos para garantizar una respuesta rápida y efectiva», expresó Castiblanco, quien destacó la solidaridad de los servicios de emergencia en esta difícil coyuntura.
En paralelo, el municipio ha comenzado un censo de familias afectadas, con el fin de tener un diagnóstico claro de la magnitud de los daños, especialmente en cultivos y viviendas. Las autoridades locales trabajan en conjunto con las entidades encargadas de la ayuda humanitaria para que las víctimas reciban la asistencia necesaria lo más pronto posible.
Con la alerta roja en marcha, Samacá enfrenta ahora uno de sus mayores desafíos en años, con la esperanza puesta en la pronta respuesta de los organismos de socorro y el compromiso de la comunidad para superar esta emergencia.