La Procuradora General de la Nación, Margarita Cabello Blanco, lanzó un llamado urgente a las autoridades colombianas para ofrecer garantías reales de seguridad a los personeros y personeras del país, tras el asesinato reciente del personero de Cumbitara, Nariño, un hecho que ha revelado las graves fallas en la protección de estos funcionarios clave para la democracia.
En su intervención en el I Encuentro de Oficinas de Derecho Disciplinario en Barranquilla, Cabello Blanco calificó como «insuficientes» las medidas de protección actuales, como chalecos antibalas, botones de pánico y silbatos. Según la Procuradora, estos recursos no son suficientes para salvaguardar la integridad de los personeros, quienes, en su labor de velar por los derechos de los ciudadanos, enfrentan constantes amenazas de grupos armados ilegales.
La Procuradora subrayó que cerca de 439 municipios en Colombia se encuentran bajo la influencia de estos grupos, lo que ha dejado a las personerías expuestas a altos riesgos, especialmente en regiones donde la presencia del Estado es limitada o nula. «Una tercera parte del país está afectada por problemas de seguridad, lo que pone en grave peligro a quienes ejercen estas funciones vitales», explicó Cabello Blanco.
El llamado de la Procuradora es claro: las instituciones gubernamentales deben tomar medidas urgentes y eficaces para garantizar la protección de los personeros y personeras, quienes juegan un papel crucial en el fortalecimiento de la democracia y la defensa de los derechos fundamentales en Colombia. Aseguró que continuará respaldando a los 1.104 personeros del país, pero exigió que las autoridades actúen con celeridad para ofrecer soluciones integrales y efectivas frente a esta situación de vulnerabilidad.
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