Las exportaciones de esmeraldas colombianas se triplican en el último año, marcando un récord histórico
Las exportaciones de esmeraldas colombianas alcanzaron un nuevo récord en 2021, triplicando las cifras reportadas en el año anterior. Según los últimos registros del Departamento Administrativo Nacional de Estadística (Dane), las ventas de estas preciosas gemas al exterior superaron los US$129 millones, una cifra que representa un crecimiento impresionante del 300% en comparación con los US$42 millones exportados en 2020.
Este notable aumento en las exportaciones no solo refleja la recuperación de la industria tras el impacto de la pandemia de COVID-19, que afectó las ventas internacionales en 2020 debido al cierre de cielos y la paralización de mercados, sino también el exitoso posicionamiento de las esmeraldas colombianas en nuevos mercados internacionales.
La exclusividad de las esmeraldas colombianas
Colombia es reconocida mundialmente como el único lugar en el que se encuentran esmeraldas de tono azulado, una característica que hace que las gemas nacionales sean altamente codiciadas en los mercados internacionales. Esta singularidad ha sido un factor clave para impulsar las exportaciones, que en 2021 alcanzaron cifras récord.
En total, 10 países adquirieron esmeraldas colombianas en bruto en 2021, con un valor superior a los US$20 millones, mientras que 26 naciones compraron gemas trabajadas por un total de más de US$109 millones. Este crecimiento en la demanda internacional demuestra no solo el interés por las esmeraldas en bruto, sino también el aumento en el valor agregado por las gemas procesadas.
Un aumento en la producción y optimización de costos
Este auge en las exportaciones ha tenido un impacto directo en la industria esmeraldífera colombiana, al permitir a los proyectos mineros del país optimizar sus costos operativos y mejorar la eficiencia en la producción. Aunque aún no se han consolidado los registros finales de producción de 2021, se estima que Colombia extrajo alrededor de 1,7 millones de quilates de esmeraldas, un aumento significativo en comparación con los 1,5 millones de quilates del 2020 y los 0,5 millones de quilates del 2019.
El aumento en la producción, respaldado por la creciente demanda internacional, ha permitido a la industria esmeraldífera no solo fortalecer su presencia en los mercados, sino también generar mayores ingresos que benefician a las comunidades mineras y fomentan el crecimiento económico en las zonas productoras.
Un futuro prometedor para las esmeraldas colombianas
Con este notable repunte en las exportaciones y la producción, las perspectivas para la industria esmeraldífera colombiana son cada vez más optimistas. Los expertos coinciden en que, si bien la situación de la pandemia aún sigue marcando la pauta en varios sectores, la comercialización de las esmeraldas ha demostrado una resiliencia y una capacidad de adaptación que permiten prever un futuro prometedor para este sector clave de la economía colombiana.
El gobierno y los productores esperan que este crecimiento se mantenga, con la expansión hacia más mercados internacionales, lo que podría consolidar aún más a Colombia como líder mundial en la producción y exportación de una de las gemas más preciadas del planeta.