En Boyacá, más del 50 % de los productores de papa han reducido su actividad o han abandonado el cultivo, una situación que preocupa a los campesinos y a las autoridades del sector. Según Plinio Hernández, presidente de la Unidad Papera de Colombia, el número de hectáreas dedicadas al cultivo de papa ha disminuido considerablemente debido a los altos costos de los agroinsumos y al aumento de las tarifas de interés de los bancos.
En la actualidad, menos de 25,000 campesinos en el departamento siguen cultivando papa, una cifra mucho menor a los 36,000 productores que había en años anteriores. Muchos de ellos, que antes sembraban entre 1 y 3 hectáreas, ahora apenas cultivan una tercera parte de su producción habitual.
Hernández expresó su preocupación por la situación y destacó la esperanza de que el nuevo Gobierno Nacional implemente medidas que ayuden a recuperar el sector. La crisis en la producción de papa pone en riesgo la estabilidad económica de miles de familias campesinas en Boyacá, que dependen de este cultivo para su sustento.