Tras décadas de abandono, el Gobierno del Cambio avanza en la recuperación del corredor ferroviario Bogotá–Belencito, una obra estratégica para el desarrollo regional. La ministra de Transporte, María Fernanda Rojas, supervisó las obras en el tramo Tuta–Belencito, que ya cuenta con 40 kilómetros en rehabilitación y una inversión de $156 mil millones.
El proyecto beneficiará a los municipios de Paipa, Duitama y Nobsa, y busca convertir el tren en una alternativa rápida, segura y sostenible. “No es nostalgia, es el futuro que estamos construyendo para Colombia”, afirmó la ministra.
La reactivación ferroviaria representa más que infraestructura: significa empleo, transporte limpio y oportunidades para el campo. Con esta obra, el Gobierno reafirma su apuesta por una Colombia más conectada, equitativa y digna.