El alcalde de Tunja, Mikhail Krasnov, enfrentará imputación por parte de la Fiscalía el próximo 28 de julio, por el presunto delito de interés indebido en la celebración de contratos. La controversia gira en torno a un contrato firmado por Ecovivienda con el abogado Juan Sebastián Ramírez, quien días antes había retirado una demanda que buscaba anular la elección del mandatario.
El contrato, por más de 50 millones de pesos, fue suscrito poco después de que Ramírez desistiera de su demanda contra Krasnov, lo que ha despertado sospechas sobre posibles acuerdos indebidos.
Además del alcalde, también serán imputados el exgerente de Ecovivienda, Eduardo Camargo; el abogado Ramírez, y podría ser vinculada la exgestora social de Tunja, Sara Catalina Pedraza.
Krasnov, de origen ruso, también espera el fallo definitivo del Consejo de Estado, que determinará si su elección como alcalde fue legal, debido a una presunta inhabilidad al momento de su candidatura. La Procuraduría ya pidió anular su elección por ese motivo.
El panorama judicial del alcalde se complica, con múltiples frentes abiertos que podrían marcar un antes y un después en su administración.