Tras intensos días de diálogo en Boyacá, el Gobierno Nacional logró acuerdos clave con líderes campesinos, parameros y pequeños mineros, que permitieron el levantamiento de los bloqueos y movilizaciones en el departamento.
Uno de los hitos fue la firma de 15 contratos de formalización minera por parte de la Agencia Nacional de Minería (ANM), beneficiando a cerca de 6.000 personas e impulsando una minería legal, sostenible y con enfoque social.
Simultáneamente, se alcanzaron diez compromisos con la Federación de Parameros del Nororiente de Colombia, garantizando la permanencia campesina en zonas de páramo, el reconocimiento de sus derechos y la protección ambiental con enfoque territorial.
El presidente Petro reiteró su apuesta por transformar el modelo extractivo hacia energías limpias y la agroindustria, destacando que el diálogo social debe ser el camino hacia una Colombia más justa y productiva.
La articulación entre instituciones como la UPTC, el Ministerio de Ambiente y la Gobernación de Boyacá fue clave para concretar estos acuerdos que marcan un antes y un después en la gestión de los conflictos rurales en el país.