El director general del SENA, Jorge Eduardo Londoño Ulloa, presentó en Tunja los resultados de su gestión, destacando tres ejes clave para Boyacá: infraestructura, fortalecimiento del campo y recuperación del carácter público de la entidad.
Londoño resaltó como logro central la destercerización de funciones, proceso que —según afirmó— permitió que el SENA “volviera a ser completamente público”, garantizando mayor transparencia y confianza en la labor realizada por sus propios funcionarios.
El retorno al campo también fue protagonista. El director recordó que mientras en los años 70 la formación agropecuaria del SENA representaba el 42 %, al inicio de su gestión había caído al 5 %. La institución trabaja ahora para recuperar su vocación rural.
En infraestructura, se confirmaron avances clave: la nueva sede del SENA en el antiguo terminal de Tunja, con una inversión cercana a $40 mil millones, iniciará obras entre diciembre y enero. Además, la sede del Curubal será entregada en marzo, tras una inversión de $20 mil millones.
Como cierre, Londoño celebró un hecho histórico: desde diciembre, cerca de 400 mil aprendices del SENA recibirán prima, salario mínimo, prestaciones y seguridad social, gracias a la reactivación de la reforma laboral, reivindicando derechos negados durante años.