Cada 13 de enero, el mundo conmemora el Día Mundial de Lucha contra la Depresión, una iniciativa respaldada por la Organización Mundial de la Salud (OMS) y la Organización Panamericana de la Salud (OPS). Sin embargo, las estadísticas alarmantes revelan que la salud mental global está en una situación crítica, afectando a aproximadamente mil millones de personas que sufren algún trastorno mental. En Colombia, el 22% de la población enfrenta trastornos mentales, siendo la ansiedad, la depresión y los trastornos del estado de ánimo los más frecuentes.
La depresión, reconocida como la principal causa de discapacidad a nivel mundial, toma un protagonismo significativo cuando se aborda la salud mental. La psicóloga clínica María Failach Malo, de Coosalud EPS, la describe como un episodio afectivo donde el estado de ánimo permanece bajo durante al menos dos semanas, variando en intensidad desde síntomas leves hasta formas severas que pueden impactar significativamente la calidad de vida.
Según el doctor Enrique Mazenett Granados, gerente nacional de epidemiología de Coosalud, la depresión y los trastornos de ansiedad representan los problemas de salud mental más comunes. La Encuesta Nacional de Salud Mental 2015 resalta la importancia de abordar estos problemas, analizando diversas dimensiones sociodemográficas y de salud mental.
Colombia cuenta con una Ley Nacional de Salud Mental y un Plan Nacional de Salud Mental 2023-2027, que propone políticas públicas centradas en las personas, sus comunidades y contextos, con un enfoque comunitario y de proximidad. Sin embargo, el Dr. Mazenett insta al Estado colombiano a trabajar en tres frentes: priorizar la salud mental, asignar recursos adecuados y diseñar estrategias alineadas con la reforma de salud en curso en el Congreso.
La importancia de la empatía y la comunicación abierta se destaca como herramienta clave para prevenir la depresión. Además, se enfatiza la necesidad de reconocer la gravedad de los síntomas y buscar ayuda profesional temprana.
La adolescencia, un periodo de cambios y crisis, requiere especial atención en términos de salud mental. La depresión en este grupo se distingue de la simple tristeza por la persistencia de síntomas durante al menos dos semanas, incluyendo ánimo bajo, llanto fácil, alteraciones en el apetito o sueño, pérdida de placer, ideas de minusvalía y desesperanza.
En el ámbito de la maternidad, existen guías de práctica clínica en Colombia que abordan la prevención, detección temprana y tratamiento de la depresión posparto. El Dr. Mazenett subraya la importancia de brindar apoyo emocional y psicológico a las mujeres embarazadas, asegurando atención prenatal adecuada e información sobre lactancia materna y nutrición.
A pesar de contar con medidas y lineamientos técnicos, el reto persiste en garantizar un acceso efectivo y sin barreras a los servicios de salud mental en el país. En el Día Mundial de Lucha contra la Depresión, Colombia se enfrenta a la tarea crucial de fortalecer su enfoque en la salud mental, abogando por recursos, conciencia y atención prioritaria.
Acerca del autor
