Aunque los bloqueos y protestas han sido suspendidos en Tunja, el problema de la disposición de residuos sólidos en el norte de la ciudad sigue sin una solución inmediata en el horizonte. Esta realidad se debe a la falta de interés de los alcaldes locales en abordar el problema de manera independiente, prefiriendo depender de un basurero común. A pesar de los esfuerzos concertados entre la Alcaldía de Tunja y la comunidad de la vereda de Pirgua, el panorama a corto y mediano plazo parece poco alentador.
El alcalde de Tunja, Mikhail Krasnov, junto con representantes de varias entidades gubernamentales, participó en una reunión de diálogo con la comunidad de Pirgua para abordar las preocupaciones relacionadas con la disposición de desechos en la zona. Compromisos fueron establecidos, pero la complejidad del problema sugiere que su resolución requerirá tiempo y esfuerzo continuo.
Entre los compromisos acordados se incluye la revisión y ajuste del Plan de Gestión Integral de Residuos Sólidos de Tunja, así como la construcción del módulo 5 de la Planta de Tratamiento de Aguas Residuales (PTAR). Además, se ha convocado a una mesa de trabajo con diversas partes interesadas para abordar temas relacionados con la instalación del servicio de gas en el sector y la disposición final de residuos en el marco del Plan de Ordenamiento Territorial.
Sin embargo, persisten desafíos significativos, como la necesidad de mejoras viales e infraestructura en el sector, así como la optimización del Sistema de Acueducto y Alcantarillado. La empresa Veolia se compromete a sugerir cambios para mejorar estos sistemas, pero su implementación requerirá una supervisión constante por parte de las autoridades locales.
La Alcaldía Mayor de Tunja se ha comprometido a seguir de cerca estos compromisos y a presentar avances en un plazo de dos meses. Sin embargo, queda claro que la resolución completa de los problemas de disposición de residuos en Tunja requerirá un esfuerzo conjunto y sostenido de todas las partes involucradas.
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