El pasado sábado 29 de junio, los mineros de Coscuez, en el municipio de San Pablo de Borbur, Boyacá, hicieron un alarmante descubrimiento. Trabajadores de la multinacional canadiense Fura Gems y de la contratista Sima fueron sorprendidos enterrando desechos químicos y aceites cerca de las bocaminas, poniendo en riesgo la salud de los mineros y la comunidad local.
Rafael Peñaranda, presidente de la Asociación de Mineros Ancestrales de Coscuez Territorio de Paz, describió el incidente en una entrevista con Caracol Radio. Peñaranda narró que la primera señal de alerta fue un fuerte olor químico que afectó a los trabajadores en las bocaminas: “Abandonaron sus áreas de trabajo, ya que los olores eran penetrantes y les producían dolores de cabeza. Salieron y ahí descubren que estaban haciendo estas canecas, y derramando el líquido”, explicó.
La situación fue documentada por el presidente de la Junta de Acción Comunal de la vereda El Silencio, quien se desplazó hasta el lugar y grabó videos que muestran a los funcionarios de Fura Gems y Sima llevando a cabo la operación de enterramiento de los desechos.
Estos actos no solo representan una violación a las normativas ambientales, sino que también ponen en peligro la salud de los mineros y los habitantes de la zona. Los fuertes olores y las sustancias químicas podrían tener efectos nocivos a corto y largo plazo, exacerbando las condiciones de trabajo y vida de la comunidad minera.
La denuncia ha generado preocupación entre los residentes de San Pablo de Borbur y ha motivado a las autoridades locales a investigar el caso. La comunidad espera que se tomen medidas para garantizar que Fura Gems y sus contratistas cumplan con las regulaciones ambientales y se responsabilicen por sus acciones.
La situación en Coscuez subraya la necesidad de una mayor vigilancia y regulación en las operaciones mineras, especialmente en áreas con comunidades vulnerables. La protección del medio ambiente y la salud de los trabajadores deben ser prioridades fundamentales en cualquier actividad industrial.
Las autoridades locales y nacionales deberán intervenir para asegurar que no se repitan estas prácticas y que los responsables enfrenten las consecuencias legales correspondientes. La comunidad de Coscuez exige respuestas y acciones concretas para proteger su territorio y su salud frente a estos peligros ambientales.