A partir del próximo domingo 29 de septiembre, Bogotá y 11 municipios aledaños retornarán al esquema de racionamiento de agua diario debido a la sequía prolongada que ha afectado la región. La medida, anunciada por el alcalde de Bogotá, Carlos Fernando Galán, en conjunto con el alcalde de Soacha, Julián Sánchez, y la gerente de la Empresa de Acueducto y Alcantarillado de Bogotá (EAAB), Natasha Avendaño, busca enfrentar la falta de lluvias que ha dejado al Sistema Chingaza sin precipitaciones durante los últimos 36 días.
El nuevo esquema de racionamiento se implementará diariamente, con cortes de servicio de 24 horas en los mismos nueve turnos que se establecieron en abril. Cada turno afectará a diferentes zonas de la ciudad y se rotará cada 10 días. Las restricciones comenzarán a las 8:00 a. m. del día asignado y se extenderán por 24 horas, con la normalización del servicio progresivamente al día siguiente.
Hasta el viernes 27 de septiembre, seguirán vigentes los turnos de racionamiento día de por medio. Sin embargo, a partir del domingo 29, los ciudadanos deberán adaptarse al nuevo esquema diario, comenzando con el turno 1. Esta decisión responde a la necesidad urgente de preservar los niveles de los embalses que abastecen a la capital y las poblaciones vecinas, que se han visto gravemente afectados por la intensa sequía.
El alcalde Galán también advirtió sobre la posibilidad de implementar medidas más restrictivas si el nivel de llenado del Sistema Chingaza cae al 36%, una proyección basada en los datos hidrológicos actuales. Actualmente, el sistema se encuentra al 45,4% de su capacidad. En caso de alcanzar ese umbral crítico, la ciudad podría enfrentar lo que las autoridades han denominado como «el día cero», un punto en el que las restricciones serían aún más severas.
La gerente de la EAAB, Natasha Avendaño, hizo un llamado a la ciudadanía para respetar los turnos de racionamiento y evitar el uso excesivo del agua en los tanques de reserva de los conjuntos residenciales, instando a la población a tomar medidas de consumo responsable. Entre las recomendaciones, se incluye no acumular agua innecesariamente, reutilizar el agua de la lavadora para descargar el sanitario y reducir el riego de jardines, entre otras.
El impacto de la sequía no solo ha afectado el suministro de agua, sino que también ha provocado un aumento en los incendios forestales. Durante septiembre, el Cuerpo Oficial de Bomberos de Bogotá ha tenido que atender 143 incendios, un reflejo de las extremas condiciones climáticas que enfrenta la región.
El Distrito mantiene la meta de alcanzar un nivel de llenado del 70% en los embalses para finales de octubre, lo que garantizaría el suministro de agua durante el fin de año y los primeros meses de 2025. Sin embargo, tras el agosto más seco en 55 años y un septiembre igualmente caluroso y sin lluvias, los ciudadanos deben ajustar su consumo y colaborar con las medidas de racionamiento para evitar una crisis hídrica mayor.
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