En los municipios de categorías 4, 5 y 6 de Boyacá, los personeros enfrentan serias dificultades para cumplir con su labor debido a la falta de presupuestos adecuados y condiciones de trabajo insuficientes. Actualmente, un proyecto en el Congreso busca aumentar el presupuesto de las personerías en estos municipios, con el fin de mejorar las condiciones de estas entidades que, según expertos, son las más débiles dentro del Ministerio Público.
Además de la escasez de recursos, los personeros de Boyacá enfrentan amenazas a su seguridad por cumplir con su deber de defender los intereses de las comunidades. En la región, dos personeros, uno hombre y una mujer, se encuentran amenazados, pero el proceso ante la Unidad Nacional de Protección es lento y complicado, lo que dificulta la asignación de esquemas de seguridad para estos funcionarios.
La situación se agrava cuando se autoriza la protección, ya que los personeros deben asumir gastos como los costos de gasolina para vehículos blindados o el desplazamiento de los escoltas fuera de la ciudad, lo que aumenta su carga financiera. Daniel Arenas, personero de Bucaramanga y presidente de la Federación Nacional del Personero, resaltó lo complejo de la situación, instando a una pronta solución para mejorar la seguridad y las condiciones de trabajo de estos funcionarios esenciales.
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