“Colombia puede ser el primer país que reconozca el cuidado no remunerado como actividad económica”: ministra Cecilia López
“Colombia puede ser el primer país que reconozca el cuidado no remunerado como actividad económica”: ministra Cecilia López
En un avance significativo hacia la equidad de género, el Ministerio de Agricultura de Colombia propuso que las actividades no remuneradas del hogar sean reconocidas como una actividad económica formal, con la intención de que el Estado y el mercado asuman estas tareas. La propuesta fue revelada en el conversatorio El cambio es con las mujeres, organizado por la Vicepresidencia de la República y la Consejería Presidencial para la Equidad de la Mujer, en el que se abordaron temas cruciales sobre la desigualdad de género y el rol de las mujeres en la economía.
El Ministerio de Agricultura señaló que, dentro del Plan Nacional de Desarrollo, se busca reconocer el cuidado no remunerado, como el que realizan las mujeres en el hogar, como una actividad productiva. “El fondo de la desigualdad entre hombres y mujeres está en el desconocimiento de la economía del cuidado no remunerado. Son actividades que realizan principalmente las mujeres en el hogar y es fundamental sacar ese cuidado del hogar para que lo asuma el Estado y el mercado”, expresó el Ministerio durante el conversatorio moderado por la vicepresidenta Francia Márquez Mina.
Este enfoque tiene como objetivo no solo visibilizar el trabajo que históricamente ha sido invisible, sino también generar políticas públicas que ayuden a redistribuir estas responsabilidades entre los sectores público y privado. De acuerdo con las estadísticas presentadas, el 61% de los hombres y el 36% de las mujeres realizan trabajo remunerado. Sin embargo, las labores domésticas recaen mayoritariamente sobre las mujeres, con un porcentaje muy bajo de hombres que participan en este tipo de actividades.
La propuesta busca cambiar esta dinámica, reconociendo el trabajo doméstico y de cuidado como una contribución significativa a la economía nacional, y por ende, debe ser apoyado y respaldado tanto por el Estado como por el mercado.
En el marco de este compromiso por la equidad, el Ministerio de Agricultura también destacó que sus acciones están orientadas a garantizar que el 50% de los beneficiarios de programas y políticas sean mujeres, con un enfoque particular en la reforma agraria. Esta medida no solo promovería la igualdad de género en el ámbito rural, sino que también ayudaría a transformar la estructura social y económica del país, permitiendo que las mujeres accedan a más recursos y oportunidades para su desarrollo y el de sus comunidades.
El reconocimiento de las actividades de cuidado no remuneradas como una actividad económica podría posicionar a Colombia como un líder global en la lucha por la equidad de género y el reconocimiento del valor del trabajo doméstico, un paso fundamental hacia una sociedad más justa y equitativa para todos.