Las comunidades de San Luis de Gaceno y Santa María, Boyacá, finalmente recibirán respuestas tras una década de denuncias por la emanación de hidrocarburos que amenaza sus fuentes de agua y tierras agrícolas.
Gracias a la gestión de la senadora Carolina Espitia, se realizó una reunión clave en la Agencia Nacional de Hidrocarburos (ANH), con participación del Ministerio de Minas, el Servicio Geológico y la Gobernación de Boyacá, que concluyó con un compromiso formal para investigar el origen del problema y definir si se trata de un fenómeno natural o resultado de actividad petrolera.
“Por fin, el Estado irá al territorio a dar la cara”, afirmó el secretario de Ambiente, Fabio Medrano. Las investigaciones comenzarán en los próximos meses, y la comunidad espera respuestas claras y soluciones definitivas.