El presidente Gustavo Petro ha anunciado que el Gobierno del Cambio está preparado para enfrentar un posible paro empresarial de transportadores de carga, también conocido como “Lock out”. En un mensaje compartido a través de su cuenta en la red social X, el mandatario subrayó que “el país no se dejará bloquear” y aseguró que a partir de este martes se tomarán las “medidas adecuadas” para mitigar los impactos de esta posible movilización.
El anuncio del presidente llega en un contexto de tensiones crecientes con los gremios de transporte de carga, quienes se han mostrado reacios a aceptar el ajuste en el precio del diésel. Según el ministro de Hacienda, el incremento del precio del combustible se realizará en tres fases, una medida que, según él, fue inicialmente propuesta por los mismos transportadores para no afectar de manera abrupta el valor de los fletes. Sin embargo, a pesar de las 14 mesas de trabajo realizadas con los gremios, el ajuste ha generado resistencia.
“El congelamiento del precio del diésel nos cuesta hoy un billón de pesos mensuales, que es lo que Ecopetrol nos cobra porque se está vendiendo en las estaciones de servicio a un precio inferior al costo real de producción,” explicó el ministro de Hacienda. Además, detalló que el Gobierno ha pagado $56 billones a Ecopetrol en subsidios al diésel, y que este año se destinarán otros $12 billones por el mismo concepto.
El ministro también recordó que la gasolina estuvo congelada desde enero de 2020 y que, al igual que con el diésel, se implementó un ajuste para reflejar su costo real. Este ajuste, dividido en tres fases, ha conllevado un incremento automático de los fletes, que se ajustaron en un 7,4% la semana pasada.
Por su parte, la ministra de Transporte, María Transporte García, destacó que el ajuste en el precio del Acpm permitirá al país un ahorro mensual de $400 mil millones, lo que se traduce en un ahorro total de $1,6 billones en lo que resta del año. La ministra también aseguró que este incremento en el precio del diésel se reflejará en el Índice de Precios al Consumidor (IPC) con un aumento del 0,3%.
“Quiero enviar un mensaje de tranquilidad: este incremento es necesario, pero no generará un impacto que no pueda ser manejado dentro del seguimiento que venimos haciendo al comportamiento del IPC,” concluyó la ministra García, buscando calmar las preocupaciones sobre el efecto que el ajuste podría tener en la economía del país.
El Gobierno se mantiene firme en su decisión, destacando que las medidas adoptadas son necesarias para asegurar la estabilidad económica y enfrentar los retos que plantea el subsidio al combustible. La posibilidad de un paro empresarial de los transportadores de carga sigue latente, pero las autoridades aseguran estar preparadas para evitar que el país se vea paralizado.