Minambiente mantiene alerta por déficit de agua en Bogotá y la región Andina
La ministra de Ambiente, Susana Muhamad, advirtió que la alerta por escasez de agua en Bogotá y la región Andina sigue vigente, destacando la necesidad de tomar medidas preventivas ante la situación crítica que atraviesan varias zonas del país. La región también enfrenta riesgos de incendios forestales en áreas como la Orinoquía y la Amazonía, debido a las condiciones climáticas actuales.
Según el Instituto de Hidrología, Meteorología y Estudios Ambientales (Ideam), existe un 70% de probabilidad de que el fenómeno de La Niña se configure en los próximos meses, aunque con una intensidad débil. A pesar de esto, diversas regiones del país, como la Amazonía, el occidente de la Orinoquía, la región Andina, el sur del Caribe y el sur del Pacífico, presentan un déficit de lluvias superior al 60%. En el caso del sur de la Amazonía, la escasez de lluvias llega incluso al 80%, exacerbando la sequía en la zona.
Situación del agua en Bogotá
En cuanto a Bogotá, la ministra Muhamad explicó que la ciudad depende del embalse de Chuza, cuya cuenca está conectada al río Orinoco, una región que actualmente enfrenta un déficit hídrico significativo. «Todavía mantenemos la alerta por la situación del agua en Bogotá», aseguró la ministra, subrayando la necesidad de seguir vigilando de cerca el nivel de los embalses que abastecen a la capital.
Muhamad también señaló que, aunque la llegada de un fenómeno de La Niña moderado o fuerte podría cambiar las condiciones hídricas en algunas zonas del país, no se espera un alivio inmediato para las regiones que dependen de la cuenca del Orinoco, como Bogotá. «Los excesos de agua en el sistema de abastecimiento de los Andes podrían aliviar algo la situación, pero desde el Ministerio recomendamos mantener la alerta, especialmente en el sistema de Chuza», afirmó.
Desafíos climáticos en la Amazonía y otras regiones
Además del déficit de lluvias, el descenso en los niveles del río Amazonas ha sido más acentuado en los últimos meses, un comportamiento típico para esta época del año pero que este año se ha manifestado de manera más severa. Este fenómeno, junto con la escasez de lluvias en el sur de la Amazonía, plantea un riesgo considerable para las comunidades locales y los ecosistemas dependientes del río.
Ante este panorama, el Ministerio del Ambiente insta a las autoridades locales y a la ciudadanía a mantener la precaución y a estar atentos a las recomendaciones frente a posibles emergencias ambientales, como incendios forestales en áreas vulnerables. Las alertas continuarán activas en las próximas semanas, mientras se monitorean de cerca las condiciones climáticas y los impactos del fenómeno de La Niña.
Este escenario refuerza la necesidad de adoptar medidas urgentes para mitigar los efectos del cambio climático y garantizar la sostenibilidad de los recursos hídricos en el país.