La Pristimantis mnionanetes, conocida como la ‘ranita de agua’, una especie endémica de los páramos y bosques altoandinos de Boyacá, está en peligro debido a la reducción y fragmentación de su hábitat natural.
Investigadores del Instituto Humboldt advierten que esta rana, que habita entre los 2.950 y 3.800 m s. n. m. en municipios como Ciénega, Ramiriquí y Zetaquira, enfrenta un alto riesgo por su distribución limitada y la expansión de la frontera agropecuaria.
Colombia es el segundo país más biodiverso en anfibios, con más de 880 especies, pero también lidera en número de especies amenazadas, superando las 300.
La clave para protegerla, señalan los expertos, está en trabajar con las comunidades rurales, quienes conviven diariamente con la biodiversidad. “Uno no puede conservar lo que no conoce”, afirman. La protección de esta especie es también una defensa del patrimonio natural e identidad local de Boyacá.